NÚMERO 31 | Mayo 2025

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Escribir en Psicoanálisis: Las Tesis en Cuestión | Dra. Graciela S. Jaimsky¹

En este artículo, la autora va a centrarse en la dificultad, inherente a la investigación, que puede presentar la escritura, desafiante, de una tesis. La Dra. Jaimsky, nos recuerda que el desafío tiene sus bemoles: articular la propia voz con la de aquellos autores involucrados en la investigación. Además, reivindica el valor de la escritura, como acto de transmisión y construcción del conocimiento, atravesada por los obstáculos que se presentan en el acto de investigar. 

“El psicoanálisis no es hijo de la especulación, 

sino resultado de la experiencia”. Freud, S. (1913)

Introducción

¿Por qué aventurarse a la investigación psicoanalítica? En esencia, diría que nos permite mantener la vitalidad de nuestra disciplina y sostener un diálogo fecundo con otros campos del saber. Aún más relevante, en esta época de desubjetivación, la investigación psicoanalítica jerarquiza el trabajo de historización, rescatando la singularidad del sujeto.

El psicoanálisis plantea que el conocimiento no es una verdad absoluta, sino una construcción subjetiva influenciada por la historia y el deseo; recordemos que una preocupación constante de Freud fue comunicar su eficacia utilizando distintos modos de argumentar para obtener la escucha de sus interlocutores. A lo largo de su extenso legado, nunca ocultó su interés por diferenciar el psicoanálisis de las teorías especulativas, buscando inscribirlo en el campo de la ciencia. Sus descubrimientos iluminaron las formaciones del inconsciente, y sus escritos desafiaron la rigidez victoriana. El acto de escribir implica siempre un destinatario, un lector a quien se transmiten las ideas. En este sentido, el público de Freud fue cambiando a lo largo de su obra, dirigiéndose cada vez más exclusivamente a colegas del campo analítico.

En la actualidad, con la irrupción de las nuevas tecnologías y la era digital, considero oportuno retomar el diálogo interdisciplinario. Es más, considero necesario resaltar, mediante la rigurosidad metodológica de una tesis, el valor de la psicosexualidad y el funcionamiento inconsciente como elementos constitutivos de la narrativa humana. Un retorno al cuerpo y a la inscripción de los estímulos sensoriales que, en el encuentro con el semejante, forjan una historia libidinal única. Pero no deseo desviarme hacia preocupaciones epocales, sino centrarme en la dificultad inherente a la investigación, en particular, al desafío de escribir una tesis. ¿Cómo enfrentar la hoja en blanco?

El Marco para Investigar

El analista que se plantea escribir una tesis debe establecer un marco de trabajo similar al que le propone a su paciente en la terapia. Es decir, elaborar una tesis requiere establecer de antemano ciertas condiciones para alcanzar el objetivo buscado, entre ellas:

  • Establecer días y horas fijas de trabajo. Así como agendamos los horarios de análisis y supervisión, “y no los modificamos”, conviene agendar un horario para dedicarle tiempo a la escritura, lectura y selección de párrafos de autores afines al tema de estudio.
  • Conversar el trabajo con colegas, participar en ateneos temáticos, presentar avances en marcos académicos, para ejercitar la argumentación y tomar nota de las preguntas o comentarios que nos hacen.
  • Reunirse periódicamente con el director de tesis para revisar los avances.
  • Y, para no perder el material, recomiendo tener un back up actualizado de las distintas versiones enumeradas, guardándolo en distintos dispositivos. 

En suma, se requiere meticulosidad y orden. 

Sobre el Género “Tesis”

Según Bajtín (2002), los géneros discursivos son tipos de enunciados relativamente estables, situados en contextos de interacción social. Entonces, en tanto la arquitectura narrativa muestra la filiación del escritor a su comunidad, resulta crucial la forma en que presentamos nuestras ideas. Por un lado, el estilo nos incluye en una construcción social, por el otro, revela la singularidad de quien escribe.

En consecuencia, el desafío tiene sus bemoles. El tesista tiene que articular la voz propia en diálogo con la de aquellos autores que trabajan en su investigación. Y, además, la redacción requiere ser presentada en cierto formato, redactado de un modo “preciso, ajustado y específico”, de acuerdo a las normativas de la Comisión Asesora en Psicología de la Comisión Nacional de Educación y Acreditación Universitaria (CONEAU). 

Sabemos por oficio que esta solicitud suele entrar en conflicto con el estilo narrativo de los psicoanalistas. Le requieren una objetividad y claridad que tiende a despojar al lenguaje de las marcas del escritor, considerando su presencia como accidental e inadecuada. Al respecto, me parece interesante el planteo de Becher (2001) cuando señala que cada disciplina tiene una identidad y atributos culturales particulares. También me resultaron de valor ciertos resultados que Savio (2015) plantea al estudiar los rasgos discursivos identificados en investigaciones psicoanalíticas de la Universidad de Buenos Aires. En su estudio, algunos indicadores que cuestionan la aparente homogeneidad del discurso académico en las tesis psicoanalíticas son: a) cierto uso de un registro informal, b) adjetivaciones valorativas, c) opacidad en la escritura y d) argumentación en espiral.

Algunas de las motivaciones posibles para tal caracterización podrían fundarse en la necesidad del psicoanalista de transmitir sus ideas con expresividad y argumentar mostrando que los avances nunca son lineales, porque la producción del saber es parcial e inacabada.

La Argumentación Freudiana

La escritura en psicoanálisis se enfrenta al desafío de echar luz a la intrincada relación entre experiencia clínica y corpus teórico. Es notoria cierta tensión inherente a dos enfoques distintos: quienes se apegan a la práctica clínica y quienes son más atentos al desarrollo de la teoría. Los clínicos, inmersos en la complejidad de casos individuales, buscan soluciones pragmáticas. Por otro lado, los teóricos suelen dedicarse a explorar conceptos abstractos. Esta dualidad, a veces conflictiva, es fundamental para el avance de nuestro campo. La clínica sin teoría carece de marco interpretativo, mientras que la teoría sin clínica se desvanece en la especulación; la investigación requiere de ambos enfoques conjugados. Y la obra de Freud se erige como paradigmática de la construcción de un conocimiento cuyos argumentos muestran con maestría la articulación entre teoría y clínica. 

Un caso ejemplar de esta metodología se encuentra en “Análisis de la fobia de un niño de cinco años” (El pequeño Hans), donde Freud (1909) despliega su particular modo de escritura en el género “tesis”, entrelazando el relato clínico (basado en el decir del padre de Juanito) con las hipótesis desarrolladas en “Tres ensayos de teoría sexual”. Notemos en la Epicrisis la rigurosidad que plantea en su párrafo introductorio para sintetizar las ideas centrales de su tesis: 

“En tres direcciones habré de examinar esta observación sobre el desarrollo y la solución de una fobia en un varoncito que aún no había cumplido cinco años: primero, para saber si refrenda la tesis que he formulado en Tres ensayos de teoría sexual (1905), segundo, por su eventual contribución al entendimiento de esta forma tan frecuente de enfermedad, y tercero, por ver si de ella se puede extraer algo para el esclarecimiento de la vida anímica infantil y para la crítica de nuestros propósitos educativos”. (p.84)

Como pueden ver, la escritura en Psicoanálisis no tiene la forma dura de una comunicación científica como las de las ciencias experimentales, ni los objetivos de una narración novelada; aunque algo tiene de ambas. Podemos pensar que los textos de un psicoanalista se sitúan en un espacio intermedio donde convergen elementos de ambas formas de comunicación. En este sentido, pueden ser vistos como una suerte de “narrativa científica”, donde la observación clínica y la reflexión teórica se fusionan para dar lugar a una comprensión más profunda de la experiencia humana.

Escars (2010) plantea que el género que usa el psicoanálisis para transmitir sus ideas es el ensayo, un texto con planteos polémicos, que no se subordina al saber constituido y reivindica lo fragmentario, con argumentación parcial, de detalle y que no elude la posición subjetiva. Tal vez estas características, como ya señaló Savio (2015), sean parte de nuestra identidad psicoanalítica, sin por ello ser incompatibles con la rigurosidad que se espera de una producción científica. 

Desobedecer al Ideal: Dilemas Subjetivos y Estrategias de Resolución

La elaboración de una tesis constituye un proceso complejo donde se entrelazan dimensiones intelectuales y afectivas. Postergar su formalización puede deberse a diversos factores, entre los que destacan dinámicas interpersonales problemáticas, como: conflictos en la relación con el director de tesis, que se manifiestan interpretando las críticas como ataques personales, o bien en la búsqueda excesiva de aprobación, la desconexión con el tema de investigación, la carencia de claridad metodológica, que dificulta la ejecución del trabajo. Por otro lado, están los factores intrapsíquicos:  autoexigencia desmedida alimentada por ideales perfeccionistas, sobrecarga de información que transforma la investigación en un laberinto de datos poco conectados, etc.

Entre las estrategias para superar estas dificultades, considero conveniente:

  • Establecer una comunicación clara y abierta con el director de tesis, buscando resolver posibles conflictos y expectativas poco realistas.
  • Permitirse el no saber y enfocarse en el progreso gradual.
  • Desarrollar métodos efectivos para seleccionar, organizar y sintetizar la información, evitando la dispersión y/o la sobrecarga.

En pocas palabras, embarcarse en el camino implica reconocer que siempre habrá aspectos del tema que no podremos abarcar por completo; aceptar la frustración que surge al intentar expresar ideas complejas y utilizar la escritura como un espacio de exploración.

Las Pausas no significan Inactividad

Nuestras ideas están intrínsecamente ligadas a nuestras experiencias personales y a nuestra historia subjetiva. Es natural que durante el desarrollo de una tesis se produzcan pausas necesarias para la “sedimentación” de lo investigado (Laplanche, 1985). Este tiempo, lejos de ser improductivo, es esencial para la integración y elaboración de las ideas, permitiendo que los conceptos se asienten y se conecten con nuestro propio bagaje conceptual. Siguiendo la analogía de Khan (1974), así como la tierra necesita barbecho para recuperarse, la psique humana requiere períodos de inactividad para procesar y asimilar la información.

Desde una perspectiva psicoanalítica, esta latencia es crucial para el trabajo de simbolización, por el cual las lecturas se transforman en conocimiento significativo. Muchas veces, la presión por cumplir plazos académicos puede generar ansiedad y resistencia, obstaculizando este proceso esencial. Sin embargo, reconocer y respetar la necesidad de estos breves barbechos y las sedimentaciones, es útil para que el tesista evite la sobrecarga, y permite que la tesis emerja como un producto genuino de su propio pensamiento. En última instancia, la tesis no es sólo un ejercicio intelectual, sino un viaje subjetivo donde el tiempo de elaboración se convierte en un espacio para el desarrollo personal. 

Un Cierre con Sabor a Invitación

La tesis es un logro personal, y como bien señala Eco (1982), los libros no están hechos para ser creídos, sino para ser sometidos a investigación. Esta es una invitación a la interpretación activa, a trascender la mera recepción de información, lo cual es un aspecto fundamental en la elaboración de una tesis.

Elaborar una tesis implica jugar y divertirse con el conocimiento. Pero ¿cómo conciliar el rigor crítico con el disfrute? La clave reside en comprender que investigar no es una carga, sino una oportunidad para explorar un tema que nos interese de verdad. Cuando nos permitimos disfrutar del proceso, las ideas se conectan y la calidad de la investigación se eleva.

Personalmente, cuando me preguntan por qué investigo, respondo que me convocan distintas razones: lo hago para continuar estudiando un tema (que seguramente tiene motivos conscientes e inconscientes), para conocer lo que otros pensaron al respecto, para explorar, jugar y discutir mis propias ideas con las de otros y, sobre todo, como bien recomienda Freud, lo hago por amor al psicoanálisis, para que su cuerpo se mantenga fuerte y vital, para que la comunidad aproveche su desarrollo, y para que como disciplina no devenga un solipsismo. El maestro dice que “el psicoanálisis (…) se trata de una empresa exquisitamente comunitaria. Y en cualquier caso sería mucho mejor que todos rugiéramos o aulláramos a coro y en armonía, en lugar de que cada cual se limite a gruñir en su rincón” (Freud y Groddeck, 1970; en Hornstein 2013, p. 23).

Notas al pie

  1.  Dra. Graciela S. Jaimskycel. +54 911 44004319 / mail. grajaim@yahoo.com.ar

Bibliografía

Becher, T. (2001). Tribus y territorios académicos- la indagación intelectual y las culturas de las disciplinas. Gedisa. 

Eco, U. (1982). Cómo se hace una tesis. Técnicas y procedimientos de estudio, investigación y escritura. Gedisa

Escars, C. (2010). Investigaciones en psicoanálisis: qué, cómo, quién. [Ponencia] II Congreso de Investigación y Práctica Profesional en Psicología XVII Jornadas de Investigación Sexto Encuentro de Investigadores en Psicología del Mercosur. Facultad de Psicología. Universidad de Buenos Aires.

Freud. S. (1909).  Análisis de la fobia de un niño de cinco años (el pequeño Hans). En: S. Freud. Obras Completas. Vol. X. Amorrortu Editores.

 Freud, S. (1913). El interés por el psicoanálisis. En: S. Freud. Obras Completas. Vol. XIII. Amorrortu Editores.

Hornstein, L. (2013). Las encrucijadas actuales del psicoanálisis: Subjetividad y vida cotidiana. Fondo de Cultura Económica.

Khan, M. M. R. (1974). The privacy of the self. Hogarth Press.

Laplanche, J. (1987). Nuevos fundamentos para el psicoanálisis. Amorrortu Editores.

Muraro, V. y Alomo, M. (2024). Retorno a Freud: la escritura del plan de tesis. [Ponencia] Memorias: XVI Congreso Internacional de Investigación y Práctica Profesional en Psicología. XXXI Jornadas de Investigación. XX Encuentro de Investigadores en Psicología del MERCOSUR. Universidad de Buenos Aires. Facultad de Psicología.

Murano, V. (2021). Fuentes y estrategias de argumentación de la prosa freudiana en La interpretación de los sueños. Revista Universitaria de Psicoanálisis, 21, 147-151.

Savio, K. (2015) Desobedeciendo el ideal: la producción de tesis en Psicoanálisis. Traslaciones Revista Latinoamericana de Lectura y Escritura, 2 (3), 99-126.

Savio, K. (2012). El género tesis y el psicoanálisis: algunas precisiones sobre esta extraña relación. Texturas, 12, 93-108.

Acerca del autor

Graciela Jaimsky

Graciela Jaimsky